20 enero 2016

Pasta fresca 🇮🇹

Vuelve a marcar día 20 en el calendario así que ¡no podía faltar al Desafío! con el que estreno por estos mundos el casi todavía recién llegado 2016. Si el reto de diciembre supuso mi primera incursión en el apasionante (y no tan complejo como parecía) mundo de los macarons, esta ha sido también mi primera toma de contacto con la pasta fresca casera. La propuesta salada de nuestra boss Rocío para empezar el año. 


La verdad, no es que tuviese muchas expectativas en cuanto a cómo podría salir sobre todo por el tema de no contar con ninguna de esas fantásticas maquinitas que sólo tienes que deslizar la masa y ellas se encargan de afinarla y darle forma perfecta. Pero vaya, es cuestión de echarle un poco de tiempo al rodillo y al final va saliendo.

Eso sí, una vez cuece prácticamente duplica su tamaño, así que hay que tenerlo en cuenta a la hora de cortarla. Si no, puede que pasé que, en vez de tallarines (como era la idea), salgan unos hermosos pappardelle (como se aprecia en la fotografía) :P