Bueno bueno, después de una ausencia un poco más larga de lo esperado, estamos ya de vuelta con el Desafío de este mes, propuesto por nuestra boss Carolina y que consistía en un postre que tuviese los típicos colores y sabores napolitanos: chocolate, fresa y vainilla. Cuando leí la propuesta me acordé de mi abuela, que en verano siempre tenía en casa una barra de helado de estos sabores.
Hacía mucho que no preparaba una tarta de estas sin horno, que se preparan muy fácilmente y el resultado suele ser bonito con la combinación de diferentes sabores-capas. Puesto que no encontré ninguna receta, para preparar esta nos hemos basado en la típica tarta de 3 chocolates (que también caerá pronto por casa, jojojo)
[English version below]
Ingredientes (molde de 22 cm.):
Para la base:
Elaboración:
Para la base: trituramos las galletas hasta que quede un polvillo.
Añadimos la mantequilla derretida, mezclamos bien y cubrimos con ello el molde de la tarta.
Reservamos en la nevera.
Para la capa de chocolate: ponemos en un cazo a fuego medio la leche semidesnatada junto con el chocolate a trocitos y removemos hasta que éste se derrita.
Por otra parte, batimos unos segundos la leche evaporada con el sobre de cuajada (así evitaremos grumos).
Una vez hierva la leche del cazo, añadimos la mezcla de cuajada y removemos hasta que hierva de nuevo. Apartamos unos segundos sin parar de remover, volvemos poner al fuego otros segundos más y retiramos.
Dejamos templar unos minutillos y vertemos al molde.
Guardamos en la nevera mínimo 1 hora y media.
Para la capa de fresa: lo mismo que con la capa anterior, sólo que batiremos la mermelada junto con la leche evaporada y el sobre de cuajada.
Dejamos templar unos minutillos (si no derretiremos la capa de chocolate) y vertemos al molde (antes hacemos unas rayas por la superficie de la capa de chocolate con un tenedor para asegurarnos que las capas quedarán bien montadas).
Guardamos en la nevera mínimo 1 hora y media
Para la capa de vainilla: igual que la capa de chocolate, sólo que añadiremos unas cuantas gotas de esencia de vainilla a la mezcla.
Dejamos templar unos minutillos y vertemos al molde (lo mismo que antes, rayamos la superficie de la capa de fresa).
Dejamos enfriar en la nevera al menos de 8 horas, aunque mejor si es toda la noche.
Para la base:
- 150 gr. de galletas
- 4 cucharadas de mantequilla
- 1 sobre de cuajada
- 175 ml. de leche evaporada
- 325 ml. de leche semidesnatada
- 75 gr. de chocolate negro
- 1 cucharada de azúcar (o el equivalente en edulcorante)
- 1 sobre de cuajada
- 175 ml. de leche evaporada
- 325 ml. de leche semidesnatada
- 75 gr. de mermelada de fresa*
- 1 sobre de cuajada
- 175 ml. de leche evaporada
- 325 ml. de leche semidesnatada
- 75 gr. de chocolate blanco
- Gotas de esencia de vainilla
Para la base: trituramos las galletas hasta que quede un polvillo.
Añadimos la mantequilla derretida, mezclamos bien y cubrimos con ello el molde de la tarta.
Reservamos en la nevera.
Para la capa de chocolate: ponemos en un cazo a fuego medio la leche semidesnatada junto con el chocolate a trocitos y removemos hasta que éste se derrita.
Por otra parte, batimos unos segundos la leche evaporada con el sobre de cuajada (así evitaremos grumos).
Una vez hierva la leche del cazo, añadimos la mezcla de cuajada y removemos hasta que hierva de nuevo. Apartamos unos segundos sin parar de remover, volvemos poner al fuego otros segundos más y retiramos.
Dejamos templar unos minutillos y vertemos al molde.
Guardamos en la nevera mínimo 1 hora y media.
Para la capa de fresa: lo mismo que con la capa anterior, sólo que batiremos la mermelada junto con la leche evaporada y el sobre de cuajada.
Dejamos templar unos minutillos (si no derretiremos la capa de chocolate) y vertemos al molde (antes hacemos unas rayas por la superficie de la capa de chocolate con un tenedor para asegurarnos que las capas quedarán bien montadas).
Guardamos en la nevera mínimo 1 hora y media
Para la capa de vainilla: igual que la capa de chocolate, sólo que añadiremos unas cuantas gotas de esencia de vainilla a la mezcla.
Dejamos templar unos minutillos y vertemos al molde (lo mismo que antes, rayamos la superficie de la capa de fresa).
Dejamos enfriar en la nevera al menos de 8 horas, aunque mejor si es toda la noche.
Para ver los bonitos y deliciosos postres napolitanos que han preparado las compañeras/os, ¡al blog del Desafío!
qué buena tu versión, estoy viendo vuestro reto y los que he visto hasta ahora son todos super chulos y ricos, el tuyo me ha encantado también! queda genial y las tres capas perfectas. Un besito
ResponderEliminarME ENCNTA TE HA QUEDADO GENIAL , ummmmm , besitos
ResponderEliminar¡Qué bonita te ha quedado! Me encantan las tartas sin horno pero nunca he hecho con cuajada. Voy a tener que probar
ResponderEliminaruna preciiosidad de tarta y no dudo que el sabor de 10 también
ResponderEliminarbesos
rosa
Me ha encantado tu tarta, se la ve deliciosa
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